NUEVA NORMA

Esta nota fue publicada en www.laverdadonline.com

Ceratto criticó el nuevo registro de armas bonaerense
No dudó en afirmar que “ya existe una ley a nivel nacional de armas, los controles tienen que apuntar a investigar en que pasa con el mercado negro”

10 de enero de 2015
El Gobierno bonaerense promulgó la Ley 14.657 que crea un registro provincial de armas de fuego, obliga a titulares de comercios de venta de armas de fuego a obtener una licencia en el Registro Nacional de Armas de la República Argentina y además, obliga a toda persona que adquiera un arma en la Provincia a presentarse a las autoridades pertinentes para dejar un proyectil testigo, que quedará registrado con identificación del arma y del usuario.
También determina que en los casos en los que el arma no fuera debidamente registrada y fuera objeto de una investigación penal, el fiscal deberá ordenar la realización de pericia balística para determinar las características, funcionamiento y aptitud de disparo para efectuar el reconocimiento del revólver y a su vez, dispone que las armas que hubieren sido decomisadas en el marco de un delito deberán ser destruidas.
Consultado por LA VERDAD, Carlos Ceratto, dueño de la casa de armas “Campini y Catena” y representante del RENAR, opinó que las nuevas medidas son positivas pero que son “más de lo mismo”, porque el mercado de las armas legales ya está fuertemente regulado y las medidas, tendrían que apuntar a controlar el mercado negro que incide directamente en el flagelo de la inseguridad.
“No tiene ninguna validez una ley provincial, cuando ya existe una ley a nivel nacional de armas que es la Ley 20429 y hay un registro nacional de armas que ya funciona. Nosotros somos agencia RENAR, estamos designados por el gobierno de turno desde el año 2002. La habilitación nos exige un sistema de alarmas, cámaras de seguridad, un sector enrejado, techo de hormigón, persianas ciegas, y muchísimas medidas de seguridad. Cada 5 años se tiene que renovar la licencia, pagos de impuestos, mas las inspecciones que tenemos de autoridades del RENAR y otras del registro provincial. Tenemos un registro de armas, de municiones, de ventas, un registro de las armas que ingresan y un registro de los trámites que se hacen a los usuarios individuales. Más exigencias no podemos tener”, apuntó Ceratto.
Y agregó: “Las personas que vienen a comprar a una armería legal como esta, están controladas, se les pide una averiguación de antecedentes, se le toman pruebas para ver si es idóneo en el manejo de las armas, tiene que ir a un psiquiatra para ver su aptitud mental, tiene que ir a un médico para ver su aptitud física y tiene que justificar el medio de vida. Si una persona hace todos estos trámites, quiere tener un arma para uso deportivo o defensa personal, no es un delincuente”

“Las estadísticas dicen que sólo el 3% de los legítimos usuarios tuvieron algún problema con las armas, pero sólo a nivel de legítima defensa, drama pasional o suicidios”, detalló.
“Yo respaldo la gestión del RENAR, porque quien quiera registrar un arma puede hacerlo, tenemos uno de los mejores sistemas de registro, que ha sido copiado por muchos países y un banco de datos impecable en donde compradores, vendedores, importadores son controlados estrictamente. Que me apunten a mi porque tengo armas y a la gente que ya tiene armas registradas, es más de lo mismo”, finalizó.
El mercado negro y la inseguridad
Para Ceratto, la autoridades deberían preocuparse realmente por el mercado de armas ilegal que por el sistema de registro de armas legales que funciona correctamente.
“Nadie menciona que hay que controlar e investigar el mercado negro. Desde las fronteras que están totalmente desprotegidas, hasta las periferias en donde hay cantidades de armas sin registrar. Que me digan en Junín que cantidad de armas ilegales hay, no hay ningún registro. Cada vez que atrapan a un delincuente, no lo encuentran con un arma legal”, expresó con preocupación.
“Deberían aumentarse las condenas cuando encuentran a alguien con un arma ilegal y que también, hagan un re empadronamiento nacional de armas para que quien no tenga registrada un arma la pueda registrar, esas serían buenas medidas”, aseguró.

También señaló, que antes su local era “de hombres” porque mayormente se vendían armas de caza, hoy en día no sólo la gente compradora se volcó a armas de defensa, sino que lo llamativo, es que “es casi igual a la cantidad de mujeres que de hombres que vienen. Hay muchas mujeres que están desprotegidas y que quieren aprender a tirar para defenderse”, finalizó.